Riesgo País 2024: Conclusiones de la Conferencia Internacional de Coface
El pasado mes de febrero se celebró la Conferencia Internacional de Riesgo País en París, un evento híbrido organizado por el Grupo Coface, que reúne cada año a los mejores expertos en análisis económico y de riesgo país.
Compartimos a continuación las principales conclusiones de las mesas redondas del evento.
Nuevos riesgos para las empresas
El primer panel de la jornada se centró en los nuevos riesgos a los que se están enfrentado las empresas, como el aumento de los ciberataques, los riesgos sanitarios, la intensificación del riesgo social y político o el cambio climático, más allá de los riesgos geopolíticos, macroeconómicos y financieros. ¿Cómo pueden crecer las empresas en este entorno cada vez más volátil e incierto?
Según Thyphaine Beauperin, CEO de la Federación de Asociaciones Europeas de Gestión de Riesgos: "La globalización y la digitalización de las economías han acentuado la interconexión entre los riesgos sanitarios, cibernéticos, sociales, políticos y climáticos, amplificando su impacto sobre los gobiernos, las empresas y las organizaciones. Al mismo tiempo, cada uno de estos riesgos está evolucionando en su naturaleza, frecuencia e intensidad".
Por su parte, Marc Darmon, Vicepresidente Senior de Thales ha manifestado que el riesgo cibernético está aumentando debido al amplio espectro del ataque digital, la profesionalización de los ciberdelincuentes y las tensiones geopolíticas.
Christophe Perillat, Director General de Valeo defiende que es a través de la innovación y la tecnología como conseguiremos anticipar y controlar mejor estos riesgos. En Valeo, más del 10% de sus ventas se reinvierten en I+D.
¿Estamos viendo los primeros signos de un "nuevo pacto" en las economías emergentes?
En la segunda mesa redonda, a cargo de los Economistas del Servicio de Estudios Económicos de Coface, se analizaron las perspectivas de las economías emergentes. Más allá de la división con Occidente, los intereses de los países del Sur Global también son diferentes e incluso divergentes. Sus resultados macroeconómicos son por otro lado muy heterogéneos, al igual que sus perspectivas de crecimiento a corto y medio plazo.
La reconfiguración de los flujos comerciales ofrece un amplio abanico de oportunidades para los países emergentes, en un contexto económico multipolar, interconectado, antagónico y, a primera vista, desorganizado.
En cuanto a la ralentización de China y el posible sorpasso de la India, parece difícil que a pesar de las sombrías perspectivas de crecimiento y de la reestructuración del orden mundial, las empresas abandonen al gigante asiático. Sigue siendo un mercado enorme, con la cadena de suministro industrial más completa del mundo, y una mano de obra que sigue siendo muy productiva, a pesar de que ahora sea más costosa.
Las materias primas seguirán desempeñando un papel clave en 2024, pero los países del Golfo han empezado a invertir en estrategias de diversificación desde hace 10 años (turismo, construcción, transporte, finanzas, etc.). Puede funcionar a largo plazo, pero, a corto plazo, esas estrategias de diversificación les convierten en competidores entre sí.
Por su parte, los países de América Latina podrían beneficiarse de su disponibilidad de materias primas y la distancia moderada que los separa de Estados Unidos, en comparación con China, por ejemplo. Sin embargo, hay muchos obstáculos que superar en términos de infraestructuras e inversión extranjera para aumentar su atractivo. En cuanto al papel de África en esta nueva reorganización mundial, la principal razón por la que los países africanos aún no están integrados en cadenas de valor más amplias se debe a entornos empresariales mediocres a causa de grandes carencias en infraestructuras, deficiencias en la gobernanza y problemas de seguridad en algunos casos. Sin embargo, hay varios países en el continente, como Costa de Marfil, Kenia o Tanzania, que son cada vez más atractivos en este sentido.
La inestabilidad geopolítica de nuevo en el punto de mira: ¿cuál es su impacto en las decisiones de inversión?
El último punto del día abordaba los retos y dinámicas geopolíticas que configuran el panorama mundial actual. Entre ellos, el estancamiento del conflicto en Ucrania, las crecientes tensiones en Oriente Medio y la continua expansión de los BRICS desempeñan un papel central.
Estos acontecimientos están contribuyendo a la percepción de que la historia se repite, mientras el mundo se recompone a un ritmo acelerado. En el trasfondo, hay un creciente desafío a los valores occidentales tradicionales y una escalada de las tensiones entre EE. UU. y China, lo que plantea cuestiones cruciales para los inversores.
2024 se perfila como un año crucial, marcado por 35 elecciones presidenciales en todo el mundo, por lo que los inversores se enfrentan a opciones estratégicas decisivas. La cuestión de cómo posicionarse en un contexto geopolítico tan complejo es primordial. Los ponentes Valerie Baudson, de Amundi, Guillaume Callonico, de la Caisse de dépôt et placement du Québec, Alexis Crow, de PwC, y Thomas Gomart, del Institut français des relations internationales (IFRI), aportaron sus conocimientos sobre esta cuestión.
